domingo, 13 de junio de 2010

La difícil decisión de asumir y enfrentar esta problemática

Para tratar la anorexia y la bulimia hay múltiples técnicas, y cada caso particular requiere de una adaptación a dichas técnicas. Hay que considerar la complejidad de las situaciones y debe hacerse una clasificación del paciente según el grado de afección que presente.

Estos trastornos alimentarios son de origen multifactorial, por eso lo más usual es la aplicación de distintas disciplinas para abordar todos los aspectos de esta enfermedad. Los profesionales se desarrollan, en su mayoría, en equipo. Todos tienen el mismo objetivo: recuperar la salud del paciente mediante la reeducación nutricional y el tratamiento de aquellos conflictos psicológicos que llevaron a estos trastornos.

Muchas personas prefieren el tratamiento individual, y otras, prefieren compartir sus problemas grupalmente, dónde se sientan contenidas no solo por el profesional, sino también por otras personas que están en las mismas condiciones.

Estos son los Grupos de Autoayuda, que ofrecen un tratamiento ambulatorio y grupal. Son muy efectivos, solamente el 5% de los pacientes participantes deben ser internados. El psiquiatra que lleva adelante al grupo puede llegar a medicar.

Otro método es la Psicoeducación, que consiste en darle al paciente y a los familiares información detallada sobre el trastorno. Hay organizaciones que cuentan con un consejero espiritual en el equipo.

Los tratamientos farmacológicos siempre están a cargo de un médico psiquiatra, generalmente miembro del equipo. Se implementarán solo en casos de depresión progresiva y para reducir la frecuencia de las compulsiones bulímicas, cuando el apoyo psicoterapéutico ya no es efectivo.
El Tratamiento Dietético Profesional tiene como meta alcanzar un peso saludable, con el cual se normalicen las funciones fisiológicas. Se logra con el apoyo psicológico y las charlas educativas del plantel profesional.

La internación depende del cuadro de descompensación que presente el paciente. Por ejemplo, un caso de deshidratación en el cual sea imposible la rehidratación oral, se administrarán sueros.

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